Ciencia y Vida

jueves, marzo 08, 2007

ENVEJECER SALUDABLEMENTE


La tasa de natalidad está disminuyendo y la población vive más tiempo, la esperanza de vida supera ya los 75 años en la mayoria de los paises industrializados. Generalmente se asocia edad avanzada con decrepitud y senilidad, pero esta idea va cambiando, ya no hay razón para asumir inevitablemente envejecimiento con debilididad.

La Unión Europea está preparando un estudio para identificar genes que se expresan mayoritariamente en la población de personas con edad superior a los 90 años. Hay de hecho estudios previos relacionando diversos genes con longevidad, como daf-2 que afecta al metabolismo, cuyo enlentecimiento puede contribuir a incrementar el período de vida de organismos que nos sirven de modelo de estudio. Pero no sólo es cuestión de genes. Hay sin duda aspectos ambientales y conductas que favorecen la longevidad: no fumar, moderar el consumo de grasas saturadas y alcohol, reducir la ingesta calórica, son parte de una filosofía que puede permitirnos vivir más, sobretodo si uno ha heredado determinados genes. Los gerontólogos tienen múltiples teorías, aunque pocas comprobaciones moleculares reales, el envejecimiento es causado por fallos en múltiples sistemas fisiológicos, resultado de diferentes agentes agresivos, cuya reparación no actua con la misma efectividad en todos los seres humanos. Otras teorias asocian los síntomas que más afligen en la vejez con respuestas inflamatorias o con genes que afectan el transporte de colesterol plasmático, como el que se asocia con la apolipoproteina E.

Los estudios más recientes siguen encaminados a identificar en personas longevas, los genes que les confieren una mayor expectativa de vida. La identificación de estos genes ayudará a crear fármacos que permitan a otros que no tienen esta ventaja natural a envejecer más saludablemente.